miércoles, 24 de febrero de 2010

Persianas de cadenilla de madera


Si tienes una casa en el campo o en un pueblo, y quieres darle un toque más rústico a tu hogar, puedes decantarte por las persianas de cadenilla o alicantinas. Son las de toda la vida, las más económicas y, además, nunca pasarán de moda.

Hay dos tipos de persianas de cadenilla las de madera natural o barnizada, y las de P.V.C. . Las primeras puedes elegirlas en varios colores: barniz, verde natural, blanca y marrón. Mientras que las segundas se fabrican en marfil, verde e imitación a la madera. No hay una gran diferencia de precio, pero las persianas alicantinas de P.V.C. son algo más económicas que las de madera.

Este tipo de persianas se fabrica desde los 4o centímetros de ancho hasta 1,75 metros.

¿Qué te parecen las persianas alicantinas?

Cintas para persianas: cómo cambiarla


El paso del tiempo hace que las cintas de las persianas se vayan desgastando, de subir y bajar la persiana. Cambiarlas es muy sencillo, puedes hacerlo tú mismo o llamar a un experto si no te ves capaz.

Lo primero que tienes que elegir es el tipo de cinta que quieres poner. En persianas capicúa podrás elegir entre una cinta de nylon, que la puedes encontrar en tres colores, blanco, beige y gris, o una de algodón. Ambas son muy resistentes y duraderas.

Para cambiar una cinta de una persiana simplemente debes disponer de un destornillador y unos alicates. Lo primero que hay que hacer es bajar la persiana, y desatornillar el cajón de la persiana. Después quitarás la cinta vieja del disco donde se recoge la persiana y posteriormente del recogedor que va a la pared.

Una vez hecho esto procederás a instalar la nueva cinta. Primero debes enrollarla al recogedor y fijarla con un tornillo para que no se suelte. Sacamos el resto de la cinta por el orificio del recogedor y volvemos a atornillar el recogedor a la pared. Como precaución para evitar que se te quede demasiada cinta dentro, puedes sujetarla con una pinza por fuera. Ahora deberás colocar la cinta en el disco por el orificio y hacer un nudo doble para que no se suelte.

Antes de volver a atornillar el cajón de la persiana debes comprobar que ésta baja correctamente y que no te sobra ni te falta cinta. Sí es así, puedes colocar el cajón y listo. ¡Ya tienes tu nueva cinta en la persiana!

¿Alguna vez has cambiado la cinta de una persiana? ¿Te parece sencillo?